La aparicion sobre la app en 2009 marco un antes y no ha transpirado un luego en el modo de relacionarse de los hombres gays. El periodista chileno Juan Pablo Sutherland lo vivio en carne misma y lo volco en el flamante entrenamiento ‘Grindrmania”. Infobae hablo con el.
El escritor y activista cultural Juan Pablo Sutherland (Chile) nacio en 1967, el anualidad en que Estados Unidos abolio el codigo Hays, un instrumento de censura en Hollywood que prohibia, dentro de otras cosas, las referencias explicitas a la sexualidad de las personajes, incluyendo todo mencion a practicas homosexuales. Cinco anos de vida luego, un conjunto de jovenes chilenos protestaba en la Plaza sobre Armas de Santiago de Chile por la discriminacion homofobica sobre la policia. “Fue Durante la reciente protesta marica moderna del siglo XX, naciendo asi nuestra misma comuna sobre Paris en plena Unidad Popular desplazandolo hacia el pelo a pocos anos de vida de la revuelta marica en el Village de Nueva York (1968)”, escribe Sutherland en su libro Grindermanias (Alquimia Ediciones, 2021), un repaso a la leyenda sobre la comunidad y tambien un artefacto hibrido en el que el autor santiaguino se convierte en su propio “objeto de estudio” para proponer la genealogia de el ligue metropolitano asi como virtual.
En su trabajo se adentra en las derroteros urbanos y virtuales del sexo gay (“en el mundo gay las citas son fundamentalmente sexo”) asi como propone desentranarlo como un “voyeur” que registra sucesos asi como reflexiones como consecuencia de la escritura amena, clara y no ha transpirado ductil, alejada de las elaboraciones hermeticas de la academia.
A las catorce anos de vida, Sutherland leyo El punto desprovisto limites, la novela de Jose Donoso que hace mas sobre medio siglo abordaba la vida de un travesti en un aldea marginado sobre Chile. Desde por lo tanto cultivo su entretenimiento por la literatura gay sobre Latinoamerica. “Antes sobre tener teoria queer tuvimos literatura”, reflexiona el tambien escritor sobre Nacion Marica (2009; 2022) en interviu quiero aplicaciones de reseГ±a sitio de citas con Infobae. Su ejemplar que lleva igual que subtitulo Del ligue urbano al sexo virtual se inserta en esa practica literaria y no ha transpirado popular que da cuenta de las practicas sexuales que recurrian a la clandestinidad resignificando las lugares publicos Con El Fin De escapar de la furor heteronormativa. Asi que Pedro Lemebel, que fue su amigo, Nestor Perlongher y no ha transpirado Severo Sarduy, dentro de otros, resuenan en sus paginas que tambien presentan un “menu sobre chicos” desplazandolo hacia el pelo un apartado acerca de la “dictadura de la selfie” en nuestros dias.
Gindermania. Del ligue urbano al sexo virtual pone en escena las practicas de cortejo asi como sociabilidad gay en el siglo anterior y no ha transpirado como se han ido transformando al transitar del cruising callejero a las espacios virtuales sobre Grindr, la app sobre citas de gays que, desde 2009, no unicamente cambio las clases en que se relacionan los varones homosexuales, sino el resto de gente de el ambiente virtual: Grindr fue el ideal para diferentes apps masivas como Tinder.
En el texto Sutherland cruza su escritura ensayistica con su inspeccion de profesor investigador, su activismo LGBT+ y las apuntes de su entrenamiento narrativo y no ha transpirado autoetnografico en urbes sobre Europa y America.
Permite unos 8 anos empezo a documentarse cuando abrio Grindr y decidio registrar en cuadernos su propia “grindermania”, igual que nombro a la mania (en ocasiones adiccion) de explorar ligues asi como encuentros sexuales con la uso virtual.
“Mi misma grindermania me ha hecho fijarme en varias cosas: la foto que alguno pone en su cuenta sobre Grindr, como la noticia sobre lo femenino esta puesta en un grado baja que lo varonil y no ha transpirado la fabricacion sobre las cuerpos hipermasculinizados a traves de lo visual”, comenta Sutherland. En el texto Asimismo citacion chats asi como muestra pantallazos con selfies, dialogos e informacion general de las usuarios. Esas conversaciones hablan de el envergadura de el falo (“en Chile es 13 cms el promedio”), de deseos (“me gusta besar asi como consumir culo”), de complexion fisica (“tonificado”), de formas de presentacion (“soy un macho versatil morboso”), sin embargo igualmente sobre dudas acerca de el desempeno sexual o preocupaciones por un tratamiento doctor a raiz sobre un VIH recien detectado.